Ejes temáticos

Manejo de Bosques: producción y conservación

Manejo de Bosques: producción y conservación


Los bosques tienen un rol central en la provisión de servicios ecosistémicos de importancia local y global (de aprovisionamiento, de regulación, de apoyo y culturales). Sin embargo, el balance entre la provisión de servicios ecosistémicos y el impacto de las actividades humanas sobre los bosques es clave para su conservación y uso sostenible. En el marco de este eje temático se buscó abarcar diversos tópicos relacionados con el uso y manejo de los bosques naturales e implantados, bajo riego y en secano, considerándose aspectos ambientales, productivos, sanitarios y de conservación y usos múltiples. Se recibieron presentaciones relacionadas con la silvicultura de los bosques naturales y de las forestaciones. Asimismo, fueron de interés trabajos de investigación y experiencias en restauración. Dada su relevancia histórica y regional, trabajos relacionados a la dinámica e implicancias de los incendios forestales fueron también bienvenidos. Temáticas relativas al manejo conjunto de bosques y ganado son también de primera importancia para este eje, incluyendo sistemas silvopastoriles y manejo de bosques con ganadería integrada (MBGI). Se buscaron perspectivas de diferentes escalas espaciales, desde el rodal hasta el paisaje o cuenca.

Comisión organizadora


  Mariano Amoroso (coordinador)
  Maria Marta Azpilicueta
  Gustavo Basil
  Santiago Varela

Conclusiones


En aspectos de silvicultura se resaltó la necesidad de pasar de la teoría a la práctica, impulsando experiencias de investigación en condiciones reales y escalas operativas. El sector cuenta con un gran conocimiento en los diversos aspectos silvícolas del manejo de los bosques, pero desde los organismos de CyT no se está logrando llegar a los tomadores de decisiones, sin poder asistir concretamente la gestión de los bosques. Esto esta directamente relacionado a la necesidad de trabajar conjuntamente en pos de la gobernanza, incluyendo a los diversos actores. Por otra parte, se resaltó la necesidad de que el principio precautorio no impida tomar acciones; hay que actuar incluso en base a incertezas y a costa de riesgos medidos. Entre los principales desafíos de los ecosistemas boscosos aparece indudablemente el Cambio Climático, pero dado el estado de conocimiento y preocupación global se propone considerarlo como un “aliado” de oportunidad para la acción. Un aspecto clave y general de la gestión forestal debería ser actuando sobre la resiliencia de las masas forestales, considerando particularidades sin utilizar recetas.

La restauración en Patagonia, por su parte, está cambiando de una escala testimonial y voluntarista a proyectos con alcance regional. Las experiencias en Chubut han demostrado que la misma es factible a través de la articulación inter institucional entre organismos públicos de gestión y de investigación, viveristas públicos y privados, voluntarios, sociedad civil en general.

Se resaltó la existencia de un relevamiento y análisis de experiencias de restauración en todo el país hasta el 2015, y se recomendó su actualización permanente. Asimismo, se señalaron como limitaciones a la restauración la falta de stocks de plantines forestales de nativas, la falta de infraestructura de viveros para escalar la producción y la dificultad para identificar sitios prioritarios para la conservación y articular con las instituciones y/o privados que tiene jurisdicción sobre los mismos. Finalmente, se destacó la relevancia de contar con la participación social para el éxito de estos programas de restauración, existiendo un importante potencial de aportes de ONGs y voluntariado a acciones de restauración.

Respecto a la ganadería en bosques y sistemas silvopastoriles se destacó la consolidación técnica de la temática y su desarrollo hacia los conceptos de Manejo de Bosques con Gandería Integrada (MBGI), herbivoría doméstica en el bosque, manejo del paisaje cultural, tipologías sociales agrarias, y potencial silvicultural del ganado.

Se realizó un relanzamiento de los acuerdos y modelos de gestión MBGI para las provincias patagónicas a partir del proyecto de Fondos Verdes (FAO). Asimismo, se consensuó el compromiso de las cinco provincias patagónicas a activar el funcionamiento de los Comités Técnicos MBGI, como también la conformación de éstos en aquellas que no existen en la actualidad, y a la implementación de los Sitios Piloto. Cabe destacar en este sentido la presencia de las respectivas autoridades de bosques de las provincias patagónicas no sólo en la apertura, sino en las charlas técnicas y en los talleres con activa participación.

Asimismo, se destacó la importancia de dar respuestas técnicas a las demandas concretas de MBGI por parte de las Autoridades Locales de Aplicación desde los organismos de C&T. Asimismo, se planteó la necesidad de conformar un sistema periódico de capacitación y debate respecto a la implementación de programas de monitoreo MBGI, posibilitando así una mayor visibilidad. Por otra parte, se recomendó considerar la inclusión de otros modelos y propuestas MBGI para diferentes tipos forestales y bosques mixtos además de ñire. Por último, se desatacó la oportunidad de Fondos Verdes para incrementar los fondos de la Ley de Bosques para impulsar planes MBGI y la conformación de los comités técnicos.

Los incendios fueron identificados como el disturbio más importante en los ecosistemas boscosos patagónicos, materia para la que se cuenta con un gran conocimiento en relación a la dinámica natural y antrópica del fuego. Aún más, el conocimiento actual posibilita desarrollar modelos que nos permiten predecir el comportamiento a nivel regional. Es necesario seguir trabajando en esta línea para incluir en nuestras predicciones a más actores en el territorio y articular un abordaje inter-institucional. Parte de este déficit se debe a la falta de comunicación, y a las variables acciones y capacidades desde los diferentes actores en la gestión integral de los incendios. Como una aliada de esta gestión aparece la silvicultura preventiva, o sea el manejo de bosques y plantaciones considerando específicamente el riesgo de incendios.

Para la gestión de los incendios de interfase particularmente, se resaltó la necesidad de espacios de intercambio y articulación entre sectores del estado (municipales, provinciales, nacionales), las comunidades locales y sus organizaciones, fortaleciendo así la percepción social de la problemática y la acción local. Asimismo, se destacó como relevante la vinculación con los ámbitos municipales pertinentes para un abordaje de las distintas facetas de la prevención y la planificación. En tanto que como preocupaciones se identificaron aspectos relativos al manejo de las plantaciones y todas sus implicancias, en especial de aquellas que se encuentran fuera de término productivo, y la disposición de presupuestos específicos y acordes a la significación de los incendios de interfase en la actualidad.

Respecto a la sanidad, se puso énfasis en la necesidad y factibilidad de interacciones entre organismos de CyT y el sector productivo en la resolución a los problemas sanitarios, remarcando que los mismos no reconocen fronteras políticas.